A través de esta campaña, la marca rinde homenaje al savoir-faire de sus artesanos que, en sus propios talleres, destacan por el arte de la pintura miniatura, el grabado y la escultura.
Jaquet Droz perpetúa la tradición de la artesanía y la decoración más refinada instaurada por su fundador en el siglo XVIII.
Estas nuevas composiciones se rigen por el signo del animal del nuevo calendario zodiacal chino: el buey.
El nuevo SW concentra el savoir-faire relojero de Jaquet Droz en un reloj potente y versátil, toda una combinación de materiales modernos y estilo distinguido.
Intensa y misteriosa, la pieza renueva la estética de su Grande Seconde sobrevolando sobre una fase lunar astronómica.