Coreografía de Maurice Béjart, La IXe Symphonie reunió en la Patinoire de Malley el Béjart Ballet Lausanne, el Tokyo Ballet, los músicos de la Sinfonietta de Lausanne y los coros de la Ópera de Lausana bajo la dirección de Alexander Mayer. Del 17 al 21 de junio, más de 250 artistas invadieron el escenario para un ‘concierto ballet’ excepcional, creado hace 50 años. Por primera vez desde hace 20 años, Gil Roman, director artístico, presentó este espectáculo en Tokio el otoño pasado.
Tres años de preparación técnica, 10.000 km recorridos para colaborar con el Tokyo Ballet, más de 15 semanas de repeticiones, la presencia de 80 coristas y una orquesta filarmónica para acompañar a 80 bailarines, un auténtico desafío para dar cuerpo a esta obra intemporal.
El 18 de junio, Jaquet Droz tuvo el placer de compartir este evento excepcional con sus invitados, quienes tuvieron la oportunidad de conocer a los bailarines durante la recepción que tuvo lugar tras la representación. Un acontecimiento en perfecta armonía con el arte de maravillar característico de Jaquet Droz.
Tras el triunfo alcanzado por las representaciones en Lausana interpretadas por primera vez en Europa, con 22.660 entradas vendidas, el Béjart Ballet Lausanne presentará su interpretación de esta obra maestra musical en el Grimaldi Forum en Mónaco a comienzos de julio.
Un escenario aún caldeado, una batería, algunas guitarras y una armónica: ¡«It’s only rock’n’roll»! Jaquet Droz presenta hoy la primera de las 23 piezas únicas que recuerda, en movimiento, el mundo de los Rolling Stones. A la derecha de un brazo que se cierne sobre la reproducción de un disco de platino (la reserva de marcha), una escena recrea sus instrumentos favoritos, en hilo de oro y pintura en miniatura. El disco externo gira hasta 8 veces seguidas, durante 30 segundos, y estará decorado con los álbumes que el coleccionista seleccionará para su pieza única. La inmutable lengua a las 9 marca el ritmo, de izquierda a derecha, de arriba hacia abajo. ¡«And I like it»!
Tras tres años de trabajo, Jaquet Droz y John Howe han desarrollado una obra maestra dedicada a la emoción, a la maravilla, a la fantasía. Vestido de oro y piedras insólitas, su dragón incluye 9 animaciones distintas, todo un hito de la relojería. En el interior de su caja de 43 mm, la pieza está completamente elaborada a mano y ofrece unas opciones de personalización prácticamente ilimitadas para el cliente. Gracias a un estudio situado en los talleres de Jaquet Droz, podrá disfrutar de una experiencia figital inmersiva que le permitirá asistir al nacimiento de su reloj, en directo. No está previsto realizar ninguna serie, únicamente se elaborarán piezas exclusivas.
Jaquet Droz y la diseñadora Shirley Zhang han presentado su reloj con repetición de minutos conjunto, acompañado de un colgante en formato NFT en la primera subasta hibernal de Shanghai Jia He. Se trata de una primicia tanto para Jaquet Droz como para Shanghai Jia He.